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97        ¿QUE HAY DE NUEVO?

 Cada año, la Iglesia nos presenta los mismo peligros del pecado, y las mismas esperanzas de Fe. Cada año, celebramos las mismas fiestas de alegría y amor. Cada año es el mismo Jesús, ayer, hoy y por toda la eternidad. Pero hay algo muy nuevo cada año, porque celebramos los Misterios de Salvación. Por ser misterios de Fe, de Revelación Divina, hay nuevas luces, nuevas esperanzas y nuevas alegrías. Todo el tiempo de la Navidad, quiere presentarnos a Cristo Luz de la creación, Luz de la Salvación y Luz de la Santificación. El gran misterio de la Encarnación es eterno en su duración e infinito en su iluminación. El Hijo de Dios Padre en todo su esplendor celestial, jamás puede cambiar en majestad y gloria. Lo que es verdaderamente eterno no tiene antes o después como lo temporal. Lo que es auténticamente infinito, no tiene más ni menos, como lo finito. Pero lo que es humano admite más luz, más vida y más amor. Lo que es creado y temporal tiene nuevas intensidades, nuevas facetas y nuevas fuerzas. Por eso, Cristo Luz puede brillar un poco más cada año, como centro de la creación, corona de la salvación y fuente de la santificación. Cuando la Iglesia coloca los ornamentos morados, quiere decir que algo tiene que morir para vivir una nueva vida. Adviento dice siempre, si el grano de trigo no cae en la tierra y muere, se queda muy solo. Pero si muere produce una cosecha maravillosa.

Navidad es celebrar el gran misterio de la Encarnación. El, que es la Sabiduría eterna e infinita, se hizo carne por la Virgen María. El Hijo de Dios en toda su divinidad es completamente escondido en su humanidad. Lo divino sumergido en lo humano no perdió su majestad infinita ni su esplendor eterno. Cristo Luz, que es la Palabra de Dios hecha visible y accesible, asumió todo lo humano en unión con lo divino sin fusión ni separación. Una sola persona con dos naturalezas, es lo principal de la Encarnación. Toda la Creación fue hecha en Cristo desde toda la eternidad. Pero cuando Jesús fue concebido por el Espíritu Santo algo muy nuevo comenzó a existir. Ya la historia humana recibe nuevas luces para entender sus sombras. Por su humanidad Jesús es la Obra más maravillosa de toda la creación. Sin su presencia encarnada es difícil apreciar la dignidad y la hermosura de cada criatura como Cántico del Amor.

Jesús es aún más, la Luz de la Salvación. La justicia Original tiene que vencer el Pecado Original, y el Calvario de la Santa Cruz ilumina la Gloria de la Resurrección. El Salvador que perdona los pecados, es el Redentor que libera a los Pecadores. El que entró en la historia humana para sanar a los enfermos en alma y cuerpo, es el verdadero Consolador Optimo y el Buen Pastor cuidando su Rebaño. El hombre Nuevo, es el Segundo Adán lavando la culpa de los salvados en la Sangre de la Cruz. Jesús de Belén es el mismo Cristo de Nazareth, Salvador y Redentor, Libertador y Sanador por su humanidad.

Jesús nació de la Virgen de Belén muy justo y muy Santo. El es el Santo del padre desde la eternidad, pero en lo humano está santificando a todos sus hermanos renacidos por agua y el Espíritu. Luz de la santificación, Jesús de Nazaret, quiere iluminar el camino de los salvados a todos sus hermanos. La presencia y el poder de su Espíritu hace de Adviento un tiempo sagrado para preparar los caminos del Señor. Los hermanos revestidos de blanco conocen la victoria de la Santa Cruz sobre su debilidad y la Gloria del monte de la Salvación. Los pequeñuelos y los humildes comprenden la Luz que brilla en cada pesebre, pero cuánto más ellos aman al Niño invitándolo y llamando a todos a una nueva vida en la santidad de su amor.

SAL AL ENCUENTRO CON EL POBRE

“Si tu quieres la paz, sal al encuentro con el Pobre". Así es el título de la jornada Mundial de la Paz escrita por el Papa para el 1 de enero de 1.993. No está en un palacio, ni en una casa pobre. Está en un establo rústico para vacas y burros. Por compañía tiene a su Madre, María y a su padre legal, José, esposo de la Virgen y a nadie más. Qué privilegio nacer así, Hijo descendiente de David e Hijo Eterno del Padre! Qué nacimiento más maravilloso envuelto en el silencio de la noche con los ángeles como testigos! Qué nacimiento más lleno de esperanza para aquellos que buscan a un Salvador y encuentran al Señor. Emanuel, Dios con nosotros, es también Jesús, Hijo del hombre e Hijo de Dios. Aquellos que buscan con amor están enamorados, y aquellos que buscan con esperanza están comprometidos, y aquellos que se casan están unidos en una visión de paz. Búsqueda, encuentro y unión son los tres pasos del amor. Toda la humanidad está buscándolo, algunos pastores lo encuentran y la Virgen con José están unidos con El. Oh! Cristianos, no se queden contentos con la búsqueda ni satisfechos con el encuentro, sino más bien entren en unión vital con El!

Conviertan la unión en comunión y la comunidad en hermandad. Cambien la ciudad en camino y la conversación en comunicación. Cultiven el amor de los enamorados en buscar el encuentro entre los comprometidos. Así la unión de los casados es el cúlmen de los enamorados y el encuentro de los comprometidos promete la flor de los unidos. Parece que el Pobre no puede saciar el hambre de los enamorados y la sed de los novios. Pero al abrir mutuamente los corazones ya están corriendo "Ríos de Agua Viva" en la profundidad de su ser. Vemos al Pobre en medio de una pobreza sorprendente regocijándose en la plenitud de la vida de su existir. El Amor es fuente de un gozo tan grande que nace un Poder de la Palabra que convierte a los incrédulos. También la paz que sale del amor se expresa en la unción del Espíritu en el orar. Pero lo más maravilloso es la miseri­cordia que produce el descanso espiritual en plena acción. Acción y obras, palabras y gestos prueban la autenticidad del amor que nace en corazones limpios porque van a ver a Dios.

La familia es la expresión más simbólica e integral de este Amor. Dios es una familia en tres personas en una sola naturaleza, manifestando y comunicando la riqueza de su vida a la pobreza de cada criatura. Sí, cada criatura es cántico de amor, y el que canta el cántico de amor recibe la riqueza de Dios en la pobreza de su ser. Lo que falta en lo humano, Dios va a aumentar en lo divino. Cada familiares un mundo aparte y la dinámica de su vida crece en el fuego de su amor. El amor en cada familia es irrepetible y único, porque Dios no tiene moldes para amar. Ser amado por Dios es más importante que amarlo a El, porque su Amor es fuente de creación, salvación y santificación. El Amor de Dios es más fuerte que la muerte, el pecado y cualquier tentación. Ser amado por el, es vivir con una nueva vida que borra el pecado y vence la tentación. Lo que está en borrador en Belén, madura en limpio en Nazareth y brilla en perfección en la Cruz. Las llagas brillantes constituyen fuentes inagotables de nueva vida. Si tú quieres la paz, sal al encuentro con el pobre!

USTEDES SERAN MIS TESTIGOS

Vive Jesús, el Señor. El vive, el vive, vive Jesús el Señor! Una de las experiencias más agradables es acompañar a una persona cuando el Señor está bautizándole en Su Espíritu. La espontaneidad del Espíritu es tan grande que las manifestaciones en cada Cristiano son diferentes e irrepetibles. Pero el testimonio de la Resurrección de Jesús en cada uno de los bautizados en el Fuego del Espíritu, siempre está presente. El otro día comenzamos a orar con una hermana recién entrando en la experiencia de Cristo Resucitado en el Poder del Espíritu. La primera manifestación comenzó con el don de llorar por los pecados cometidos durante los 30 años alejada completamente del Señor y su Iglesia. La sinceridad de los llantos de contrición era muy impresionante. Aún más fuerte para ella fue la experiencia de gratitud a Jesús por su Sangre derramada en la Cruz, por el perdón experimentado. Ella dijo que nunca en su vida se sentía tan limpia en su corazón, tan libre de culpa frente a Dios de castigos y amenazas, y nació un amor hacia un Padre cariñoso y bondadoso.

Otro signo muy común entre los católicos bautizados en el fuego del Espíritu, es el amor hacia la Palabra de Dios. Ella comenzó a leer la Biblia unos dos años atrás, cuando su hermana formó un grupo de oración en la familia, pero era muy difícil entender el mensaje y después de un rato la dejó. Pero ahora con los dones del Espíritu, el sentido de la Palabra es lo más claro y con mucha alegría. Escucharla hablar del Salmo 143 o Is. 27:3 4, era muy agradable por el entusiasmo y la penetración espiritual. Ella es como un evangelio viviente, y el testimonio de la Palabra está en un corazón lleno de bondad. La interpretación es un poco fundamentalista y muy poco científica, pero muy convincente. Todos los momentos libres en el trabajo ya son minutos preciosos en el Señor Resucitado que vive en su mensaje escrito.

Algo muy peculiar de cada cristiano renovado en el poder del Espíritu es la manera de brotar en lenguas y mantener el don vivo. Para ella el carisma de hablar en lenguas le causó un susto grande con una preocupación en su vida con el Señor. Escuchar las sílabas sin entenderlas provocó cierto rechazo en el principio. Después de orientarla un buen rato ella comenzó a orar por primera vez en su vida, pidiendo el Espíritu en poder. Casi enseguida ella sentía una fuerza caliente llenando su cuerpo entero con ganas de gritar alabanzas. Le costaba un poco abrir su boca y hablar fuerte cuando no hay palabras. Una vez libre de las inhibiciones y temores humanos, ella comenzó a orar en lenguas con una dulzura completamente celestial. Ahora, alguien necesita algunos minutos libre cada día para ejercer y crecer en el don y el buen uso pastoral. El testimonio del don de lenguas es maravilloso en la vida espiritual, porque purificar el corazón es indispensable para acercarse a Dios.

El fruto principal en ella, es el Espíritu Misionero. Ella dijo que más antes le daba vergüenza. Ahora ella tiene ganas de salir desde el viernes hasta el lunes proclamando a Cristo Resucitado con mucho poder. El testimonio de una vida tan cambiada es bueno, pero hay que anunciar el Evangelio con el Poder del Espíritu en prédicas y enseñanzas. Los signos poderosos de sanar enfermos, liberar de las dominaciones, y sanar los enfermos son muy notables en los misioneros de un Nuevo Pentecostés. Sí, ustedes serán mis testigos.

JESÚS, VIDA ABUNDANTE PARA TODOS

Los hermanos, Jesús es nuestra sabiduría, la sabiduría de todos los cristianos. En El encontramos la Luz de las luces, la Vida de las vidas y el Amor de los amores. Este Congreso de un Nuevo Pentecostés en La Mansión, tiene por lema; "Jesús, Vida Abundante para todos". Ven a Mí, dice el Señor, Yo tengo para ti una Nueva Vida para saciar tu sed. Sí, vengan a mí todos los que tienen hambre, reciban en su corazón el Pan Vivo que baja del cielo. Sí, el Pan que da Vida, y Vida abundante, es El mismo Jesús que sacia tu sed con su sangre derramada en la Cruz. Dedicamos este Congreso de un Nuevo Pentecostés, el XVII, al crecimiento espiritual, a la madurez en la Nueva Vida.

En primer lugar, el Banquete Eucarístico es para los pobres que andan en pos del Señor, sin riquezas y fuerzas humanas. A ver ustedes que andan con sed, vengan a tomar agua. No importa que estén sin plata, vengan no más. Pidan trigo para el consumo, y también vino y leche, sin pagar. ¿Para qué van a gastar su dinero en lo que no es pan? Y su salario en cosas que no alimentan? Atiéndanme y acérquense a mí. Escúchenme y su alma vivirá. Busquen a Dios que ahora lo pueden encontrar, llámenlo ahora que está cerca" (Isaías 55).

En segundo lugar, el banquete Eucarístico, es para los sencillos, y aquellos están muy preparados humanamente. "La sabiduría ha construido su casa, para lo cual, levantó sus siete columnas. Luego desde los lugares más altos de la ciudad mandó a sus sirvientes a proclamar, "Pasen por acá los hombres sencillos". Y también a los que no tienen preparación les dice, "Vengan Coman de mi pan y beban del vino que he preparado; dejen lo que nos sirve y vivirán, y gracias a saber, irán por el buen camino ".

En tercer lugar, hay una mujer muy bien preparada para participar en la Encarnación de la Sabiduría de Dios, la Virgen María. "Muchas mujeres han obrado maravillas, pero tú las superas a todas. Engañosa es la gracia, vana la hermosura; la mujer que tiene la sabiduría será alabada. Que pueda gozar el fruto de su trabajo y que por sus obras todos la celebren" "Cuando asentó las bases de la tierra, yo estaba a su lado, arquitecto de sus obras, y era yo, ese día, su delicia jugando en su presencia en todo tiempo; yo me divertía recorriendo su creación, mi deleite está con los hijos de los hombres".

 En cuarto lugar, está la grandeza de la Mujer que dice en Caná de Galilea, "Hagan todo lo que él les manda'. Y ella misma nos enseña diciendo con el Libro de Sabiduría: "Ahora, pues, hijos escúchenme, felices los que siguen mis caminos. Escuchen mi enseñanza y háganse sabios, no la desprecien. Feliz el hombre que me escucha y se presenta a mi puerta cada día, esperándome en la entrada de mi casa. Porque el que me encuentra, encuentra la vida, ha recibido el favor de mi Dios. En cambio, el que me ofende se hiere a sí mismo, y todos los que me odian van a la muerte". Que María nos acompañe siempre, haciendo todo lo que El nos diga en la construcción de su Reino. Un reino donde la comida del cuerpo no falte a nadie, y donde el Cuerpo de Cristo alimente al mundo entero.

Ojalá que todos experimenten durante este congreso, que la Sabiduría del Espíritu es mucho más grande que todas las filosofías humanas; que el Entendimiento del Espíritu, es mucho más pro­funda que la inteligencia humana, que el Conocer del Espíritu pasa mucho más allá que la ciencia de Dios, y que los consejos del Espíritu valen mucho más que la prudencia humana, y que la piedad del Espíritu, es más justa que toda la justicia humana; que la mansedumbre del Espíritu es victoriosa sobre toda la fortaleza humana y que la humildad del Espíritu es la corona del temor de Dios.

Fin del libro 5.