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89           EL ALMA DE SANTA CRUZ

Sin duda Santa Cruz vuelve más y más a sus raíces: Los valores espirituales. La Fe Cristiana Católica sigue como el valor principal del pueblo Cruceño. Es la Luz de la Fe en Jesús que inspira los sacrificios y orienta las decisiones principales de los líderes. Las conversiones auténticas son más numerosas y muchos jóvenes quieren consagrar sus vidas completamente a Cristo y su Reino. El Espíritu contemplativo, como "madre" de la acción, está creciendo entre los creyentes. El espíritu de oración sincera crece y las celebraciones de los misterios de salvación son muy felices. La Fe salvífica en la Vida Eterna engendra la Fe que es confianza en nuestro Padre. Más y más creyentes ya son fieles, que viven una entrega como discípulos del Señor. El Poder del Espíritu produce una Fe que mueve las montañas y rompe la dureza de corazones. Muchos de los más fieles tratan de poner la Fe en acción, la esperanza en coraje y el amor en obras. La Visión de una Santa Cruz nueva está presente en el amor hacia los pobres, que en los estudios científicos de sus recursos. La Esperanza en Jesús da sentido a las múltiples esperanzas humanas, que constituyen un futuro lleno de promesas. Las decisiones de Fe son las esperanzas de vida y las fuerzas de acción.

Pero el desafío de la "nueva cultura" es sumamente fuerte. ¿Qué dicen muchos de los profesionales formados en las universidades en el extranjero? Ya el ser humano es capaz de solucionar sus problemas sin creer. Dios está marginado de las decisiones de cada día y el ser humano puede construir el mundo nuevo sin revelaciones, doctrinas y mensajes de Fe. Los medios de comunicación social transmiten las hazañas técnicas y científicas. También la facilidad de viajar hasta la luna y descubrir nuevas dimensiones del universo son experiencias que aumentan el globo del orgullo y pinchan la llanta de la soberbia. El ser humano del mundo actual es muy secularizado, pero el secularismo no substituye la humildad de la Fe. Por lo menos cada persona que vive en Santa Cruz, tiene un acceso muy fácil a Dios Vivo que quiere dar su Espíritu a aquellos que invocan su nombre. Con la Fe, entran siempre los grandes proyectos de construir un mundo mejor. El peligro más grande es el materialismo que glorifica los bienes materiales y el dinero como un dios falso. La causa de mucha inseguridad y tristeza es poner la confianza en la plata y la alegría en los placeres. La seguridad y la alegría son experiencias espirituales y lo material no puede llenar el vacío en cada corazón. Sólo Dios hace a cada persona feliz y el alma descansa sólo en él.

Los grandes valores morales constituyen la plenitud de vida llenando el corazón con paz. El amor de Jesús que mueve la justicia social es una de las necesidades más grandes. No podemos vivir en paz y construir hogares bendecidos sin lo justo, como el valor moral más importante. Tanto hablamos de la corrupción moral que da la impresión que es capaz de destruir todo. Santa Cruz necesita mucho coraje para vencer los obstáculos de ríos grandes con inundaciones frecuentes, una deforestación con la consecuente desertificación y vientos más y más huracanados, con la erosión de suelos. Toda la ecología es una amenaza fuerte de destruir todo el pueblo en 50 años, si no hay grandes cambios en el uso de los recursos para un desarrollo integral y sostenible que pueda conservar la tierra por largos, largos años. Los valores morales en el matrimonio y la familia son los más atacados. Sólo los valientes van a resistir la gran tentación de ser oportunistas y pragmáticos en el buen uso de todo para todos. Para alcanzar la felicidad moral en los valores más humanitarios, cada persona y cada familia, tiene que solidarizarse con el bien común de todos.

La libertad política de 182 años, es una bendición muy grande. Es la puerta y protectora de las otras libertades sociales del trabajo, empresa, educación académica, etc. Algunos piensan que lo que tenemos no es la libertad de los hijos de Dios, sino el libertinaje del diablo, tentando a todos a vivir una vida de oscuridad, esclavitud y enfermedad. No es por el poder de golpes y violencias que la patria va a ser construida. Felices son los limpios de corazón, van a ver a Dios. Felices los trabajadores por Paz de Dios, van a ser llamados hijos de un Padre y hermanos en la Fe. Hay mucho para hacer y pocos son los obreros. El mundo actual está más y más saturado con planes y proyectos. En fin, felices son aquellos que construyen la Paz. El futuro está en las manos de los jóvenes actuales, pero lo presente de la patria está en las manos de los justos que actúan con mise­ricordia.

LA LLEGADA DE JESÚS A LAS AMERICAS

Siempre el Evangelio de Jesús es una Buena Noticia. Pero lo que comenzó hace 500 años, 11 de octubre de 1.492. es algo muy grande. No es tanto el descubrimiento de las Américas, ni el encuentro de dos mundos, que tienen una importancia única en la historia humana. Lo que pasó en la Historia de la Salvación es algo que los ángeles quieren ver: "Jesús llegó a las Américas para comunicar a los pueblos y sus culturas el mensaje de la Salvación, y darles I a misión de liberar sus tierras de las dominaciones y esclavitudes históricas. Jesús llegó para quitar la violencia y la ignorancia de los corazones convertidos a El. El Señor llegó para formar un Pueblo Nuevo, un Pueblo de peregrinos del amor y obreros de la justicia. Este Pueblo de profético y no político, es salvífico y no ideológico. El que nació Príncipe de la Paz en Belén pasó los 3 años del ministerio público como Evangelizador de la Paz. Jesús conquistó la paz en la Santa Cruz y Resucitó Constructor de una civilización del Amor. Los primeros evangelizadores llegaron con Cristóbal Colón, para decirles a los nativos: 'No teman! Traemos buenas noticias de gran alegría. Está llegando a sus tierras El que nació en Belén pobre y humilde. El signo de su Presencia entre ustedes es el establo, el pesebre y un Niño envuelto en pañales. En Su Nombre, ustedes van a levantar una sola bandera del Amor, una sola bandera de reconciliación: La Santa Cruz de Jesús. Ustedes van a regocijarse con los ángeles en decirles a las mujeres, "¿Porque ustedes buscan al que vive, entre los muertos? Resucitó!, como El les prometió.

El está derramando Su Espíritu como en principio sobre toda carne. Sus hijos y sus hijos van a profetizar y sus ancianos van a soñar sueños de esperanza. Vayan alas Américas y proclamen la Buena Nueva a todos los pueblos y naciones. Hay discípulos míos de todas las razas. Enséñales todos los Misterios de Salvación. Bautícenles en el Nombre del Padre, del Hijo y del Espíritu Santo! Yo estoy con ustedes hasta el fin del mundo! Sí, vayan a los rinconcitos de las Américas y anuncien con Poder la Buena Nueva de Jesús, Denuncien las injusticias en el Nombre del Justo, quien es el "Sol de Justicia". Despierten las semillas de Fe en los pobres y sus culturas, si, pero preséntenles la Persona de Jesús, y su amor privilegiado hacia los pequeñuelos, los enfermos y los pecadores. Liberen a los presos de sus calabozos y abran los ojos de los ciegos. Rompan las opresiones, de toda clase, y comiencen un año de regocijo, un año de júbilo en el Señor. Pero prepárense porque algunos van a levantar arriba el gran signo de contradicción, el signo de victoria, el signo de los mártires de 500 años, el signo de la Santa Cruz. Sí, algunos van a adorar a los dioses falsos, los ídolos antiguos; el poder, el placer y el dinero. El enemigo no duerme y el combate espiritual perdura. Como la primera evangelización perdió mucho de su fuerza por la espada, el trono y el lucro, así ahora, las ideologías y la política, la droga y el sexo, el dinero y la tecnología ablandan la conversión de la Cruz y la Gloria de la Resurrección.

Sí, Señor, la cosecha es madura, pero los obreros son pocos. Manda, Jesús, sembradores y cosechadores a tu viña. Sí, Jesús, queremos gritar a los cuatro vientos y alas cuatro direcciones el mensaje constante y perenne. El es el mismo Jesús, ayer, hoy y siempre. Pero también queremos clamar a ti Jesús, muéstranos el camino al Padre, a tu Padre. Enséñanos a decir de todo corazón, Abbá Padre! Sí, Jesús en la Gloria de tu Resurrección, transforma la tristeza de hoy en la esperanza de mañana, las derrotas de ayer en la victoria de hoy; la locura de siempre en tu sabiduría eterna. Todos queremos cantar contigo, "Has cambiado mis lamentos en bailes Señor, has desatado mi cilicio", Queremos ver a Nuestra Madre, la Santa Iglesia Católica, limpia e inmaculada, sin mancha ni arruga. Queremos sentir una hermandad como en el tiempo de los mártires cuando los Africanos exclamaron, "Miren a los Cristianos como ellos se aman los unos a los otros. Miren como ellos entierran a sus muertos con cariño. Miren como ellos cantan cánticos nuevos, cantos de una vida nueva, un nuevo amor, una nueva alegría. Y en medio de esta multitud inmensa de hombres y mujeres salvados en los cinco siglos de Cristianismo en las América, hay alguien que es Una y Única entre todas las mujeres, alguien quien es Madre y Virgen; alguien que está bajando de su trono de gloria en el cielo, alguien quien es la estrella de la Mañana, del Mar y de la Nueva Evangelización, alguien quien quiere decirles en nombre de muchos matrimonios: Jesús, no hay vino, no hay alegría, no hay amor! Haga todo lo que El dice: Sí, Santa María de los caminos y de las calles, de los mercados y de las fábricas; Ven con nosotros comparte el combate de la liberación de las Américas y Canta: "Escuchad Américas, la Verdad os Hará Libres”.

EL RICO SIN NOMBRE

 Jesús es el Gran Maestro del corazón y el pedagogo de la santidad. El nos enseño más por la vida que por la palabra. La parábola del hombre rico y el pobre Lázaro, es el ejemplo hermoso de una enseñanza de corazón y un ejemplo de la santidad. En el mundo de pecado, es el rico quien tiene nombre, fama y prestigio. El pobre no tiene nombre, no es conocido y su vida no tiene importancia. Pero en el Reino de Cristo el pobre se llama Lázaro, y el rico no tiene nombre. ¿Qué importancia tiene esto? El nombre significa la persona y su misión en la historia de salvación. Entonces para Jesús el rico es "desconocido" por Dios, y su vida pierde sentido en Su Reino. EI pobre llamado Lázaro, tirado al suelo frente a la casa del rico, está tan abandonado que las perros se le acercan para lamer sus llagas. El tenía ganas de comer las migas que caían al suelo de la mesa del rico, pero nadie le daba nada. Mientras tanto, el rico comía suntuosamente cada día, vestido con púrpura. Ambos murieron. Lázaro es llevado arriba en los brazos de Abraham, pero el rico se pierde en el fuego de los diablos, lejos del Dios de Abraham, Isaac, Jacob, el Dios que vive.

¿Cuál es el pecado tan grave del rico, para terminar perdido eternamente? El no mató a nadie, y tampoco trató mal al pobre Lázaro. Simplemente lo dejó gravemente enfermo, sin comida, abandonado a la vida solitaria para morir sin consuelo. El pecado grave del mundo actual es su carácter babélico, de la torre de Babel. Es decir, vivir, actuar y construir el mundo nuevo con las fuerzas humanas sin Fe. Dejar morir al pobre Lázaro, sin oír de Cristo y su Reino, es un pecado grave de omisión. El Nuevo Mandamiento del Amor nos obliga a dar nuestras vidas para salvar a los otros, a compartir nuestra abundancia para vivir como hermanos. Las obras corporales de misericordia, constituyen las normas para construir el camino seguro de salvación. Dicen que el mundo actual, está lleno de amistad, libertad y justicia para construir los caminos nuevos para la nueva humanidad.

Como San Pablo escribió a Timoteo, "Proclama la Buena Nueva con toda su fuerza a tiempo y a destiempo". La primavera en Santa Cruz es muy fuerte dando una impresión, que los mejores sacan del sufrir una fuerza ardiendo más y más. La vasta mayoría viven de la mano a la boca, sin reservas. La tragedia de muchos, es vivir aisladamente sin sentir el Reino. Pero, Jesús no quiere hacer un imperio de ovejas abandonadas y recién encontradas. En mi Reino hay banderas de amor con fuerzas del Espíritu para romper las cadenas y dar la libertad. El porvenir de una Bolivia Nueva sin mancha ni arruga, hecha Nueva para construir el Reino de Jesús con las culturas dispersas, necesita el buen uso de los medios de comunicación social. Recuérdate siempre la lección de Caín y su hermano Abel. Caín, lleno de envidia y resentimiento, mató a su propio hermano, precisamente porque Dios aceptó los sacrificios ofrecidos por Abel, más que por Caín. Enseguida Dios Yavé se apareció a Caín diciéndole: ¿Dónde está tu hermano Abel? Y la respuesta de Caín fue, ¿Acaso soy yo el defensor de mi hermano? Pregúntale a él. Gracia a Dios, la nueva tecnología da un bienestar a todos los capacitados. Aprovechando las luces y evitando las sombras es más o menos fácil alcanzar una recompensa para el bienestar de todos.

ALEGRATE PUEBLO DE DIOS

Alégrense hermanos porque en medio de ustedes el Señor está. Sí, alégrense Cristianos porque ahora el día de su gloria está mucho más cerca que el momento de su Salvación Sí, alégrense Pueblo de Dios, porque estamos en el umbral de un Nuevo Pentecostés. Pónganse felices porque Dios nuestro Padre está ofreciendo su Espíritu de Amor nuevamente a toda la humanidad. Es El que hace a cada Cristiano feliz, cada familia consagrada y cada celebración ungida. Es El que santifica el Cristianismo por hombres y mujeres nuevos, por corazones y mentes renovadas y por comunidades y celebraciones transformadas. Todo lo hago nuevo dice el Señor. Qué los nuevos corazones canten nuevos cánticos y los Cristifideles lean un Nuevo Testamento y formen un Pueblo Nuevo! Que la creación no siga gimiendo y llorando esperando su liberación por los nuevos hijos de Dios. Que una nueva creación comience y una nueva historia de salvación crezca. El que santifica la Iglesia y salva a los pecadores es El mismo Espíritu que renueva la faz de la tierra y hace una nueva civilización del Amor. El Espíritu quiere glorificara Jesús el Señor de la nueva cultura, como alma de cada familia y cabeza de su iglesia. Y más que nada, "Escuchad Américas, la Verdad os hará libres",

Sí, que los mismos ángeles y santos sean felices, que sus hermanos en la tierra renazcan criaturas nuevas por el agua y el Espíritu. Que la Virgen María sea una Madre contenta en ver la Iglesia de su Hijo, Jesús, andando guiada por la Estrella de la Nueva Evangelización. Que el mismo Jesús se regocije en ver que la santidad de su Cruz nuevamente tiene Poder para liberar pueblos y naciones de sus esclavitudes. Que el Padre del amor reciba la alabanza de los coros celestiales y terrenales cantando un cántico nuevo que dice, "Cada criatura es un cántico del amor". Que el Espíritu de la Verdad brille en las antiguas tinieblas disipando la oscuridad que apagó la Luz del Cordero iluminando los nuevos corazones. Felices son aquellos que disfrutan la libertad de los hijos de Dios cantando: "en mi corazón hay banderas de amor..." Felices son los constructores de una sociedad más justa usando las armas espirituales de misericordia y las armas morales de justicia. Que las velas del Amor cambien el Sol de la justicia en rayos de misericordia. Felices son aquellos con corazones limpios; van a ver a Dios que es pura luz, infinito amor y eterna esperanza.

Pero, para entrar en la Gloria perfecta hay que pasar por la primera muerte del cuerpo, que es como un gran dormir que permite al alma volar a las manos de su creador y hacedor, al corazón de su revelador y su remunerador. La victoria de la vida sobre la muerte es el triunfo del espíritu sobre la materia y la luz sobre las tinieblas y el amor sobre todos los desamores humanos. La conquista del cielo es puro regalo y justa recompensa. El soplo de la vida da eterno descanso al alma y las llamas de purificación preparan una posesión de la Vida Eterna. Sí, felices son aquellos que no conocen la segunda muerte por arrepentirse y cambiar la vida en la Sangre del cordero. Felices son aquellos que mueren en el Señor. Descansan de sus aflicciones y sus obras lo acompañarán. Digno eres del Cordero que quita el pecado del mundo, dando esperanzas en vez de lágrimas, y alegrías en vez de llantos. Sí, Señor, sólo Dios hace a cada persona feliz. Mi alma descansa sólo en El.