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Libro 6 46 - 50 Cada una de estas páginas contiene 5 cartas |
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SEÑOR, DAME DE BEBER
Todos hemos visto las plantas marchitas y los animales sedientos
cuando no hay agua. Así es la sequía espiritual. Hay momentos en la
vida espiritual cuando las oraciones salen secas y tibias y el amor se
vuelve amargo y apagado. La búsqueda de los tíos de agua viva pasa por
el desierto de la soledad y sube a las montañas de la purificación.
Los encuentros con los manantiales de agua cristalinas, viva y vital,
son privilegiados en el Señor. Las promesas de Jesús a la mujer
Samaritana se cumplen diariamente en muchos Cristianos que conocen al Señor:
"pidan de mí y yo les daré agua viva, y el que bebe del agua que
yo les daré, no volverá más, a tener sed".
No basta renacer por Agua y el Espíritu; hay que crecer„ hay
que madurar, hay que producir. Como el canto dice, "Mora en mí
amado mío. Ven hacia mí, sacia tu sed. Mi fuente en ti se vuelve río,
lo que tengo, lo que soy, a todos doy".
Hace algunos meses pasó un matrimonio muy feliz, por Santa Cruz.
Preguntándoles que clase de vida cultivaron para manifestar una
vida tan agradable, tan bendecida, la respuesta fue sorprendente. Hemos
descubierto la fuente de agua viva en nuestro hogar. Mas antes pasamos
largos meses y años pesados y cargados. Escuchamos, "Con Cristo en
la familia un feliz hogar", y experimentamos un mejoramiento grande
en nuestra familia, tratando de darle a Jesús el centro de todo. Pero
faltó algo. Un día alguien nos dijo, acaso ustedes no han recibo el
Espíritu Santo en su matrimonio. El es "el alma" de la
Iglesia, El es "el Alma" de su familia. Cultiva una relación
vivencia¡ con El, cultiva la comunión con El, entrando en su descanso.
Qué maravillosa es la diferencia. Ahora sabemos vivir con ríos de agua
viva que brotan de El, "Te doy mi voz, agua de vida, mi Santo espíritu
te doy, fuente de amor y alegría. Lo que tengo, lo que soy, a todos
doy".
Pero este tipo de experiencia casi siempre nace en un sufrir en
la Cruz de Jesús. La Fe crece y se profundiza en crisis, cuando las
fuerzas humanas no dan más y gritamos, "Señor, no doy más!"
"Ahora él puede hacer todo por que la prueba produce la paciencia,
de la paciencia sale la Fe firme y de la Fe firme brota la esperanza, la
cual no nos engaña, porque el amor que Dios nos tiene se ha derramado
por el Espíritu Santo que El nos ha dado:” Durante Cuaresma Jesús en
la Cruz dice a todos: "Te doy mi amor, te doy mi vida, sin titubear
confía en mí. Vive mi paz, vive mi gozo, lo que tengo, lo que soy, a
todos doy." Sí, Señor! ¡Dame de beber!. 47
TU QUE DUERMES, DESPIÉRTATE
Cuando todo es oscuro, que brillante es un solo fósforo
encendido. También cuando la vida se ha vuelto difícil, que hermoso es
encontrar un solo amigo de verdad. Por eso la voz de la verdad dice:
"Levántate de entre los muertos, y fa Luz de Cristo brillará
sobre ti". Es la Vida que da Luz y la Luz brilla en las tinieblas y
la noche oscura jamás apagará. Así es la experiencia de la palabra de
Dios que calienta el corazón enfriado antes de iluminar la mente
confundida. Pero una vez que el Espíritu está ardiendo por el amor sus
rayos suben como flechas disipando las tinieblas más densas. El dormir
espiritual el mucho más pesado que el descanso corporal. Pero una vez
que la Luz de la Fe despierta el espíritu durmiendo, su fuerza
renovadora es mil veces más poderosa que todas las energías
corporales. En los mejores momentos espirituales hay una experiencia muy
agradable: "Todo lo que se pone bajo la Luz viene a ser luz".
Las tardes culturales y los trabajos corporales participan en la luz del
reine comunicando creatividad en las obras humanas.
Es mucho mejor encender una sola vela que quejarse contra las
tinieblas. Sí, todos sabemos que es necesario denunciar las obras estériles
de las tinieblas. Pero el fin grande no es destruir todo lo oscuro, sino
construir por la Luz hasta que todo se vuelve claridad. Un gran
predicador dijo que los mejores sermones criticando a los borrachos y a
la borrachera cambian muy poco el alcoholismo. Pero una sola prédica
abriendo sendas de esperanzas y amor cambian los corazones más cerrados
en caminos de luz y paz. Las grandes decisiones en la vida nacen en
palabras de aliento y no en gritos de condena. Todos somos concebidos y
nacidos en las tinieblas del pecado, ciegos por nacimiento. Pasamos
largos años buscando las luces de las verdades humanas. Pero cuando la
Luz de la Verdad penetra la noche oscura del alma, ella produce nuevos
hombres y nuevas mujeres. El renacer por el Agua y el Espíritu es el
primer paso en un peregrinaje de largos años buscando la Luz de luces,
la Esperanza de las esperanzas y el Amor de los amores.
Pero Dios no quiere cristianos demasiado contentos con su
conversión personal y familiar. Cristianismo no es "Jesús y
yo" y nada más. Jesús vino para salvarnos como un Pueblo Nuevo,
Pueblo de Dios. Hay muchos Cristianos estancados en el fango del
individualismo que viven cerrados en el Yo mismo y no sabe respirar los
aires más frescos del prójimo. Jesús dice, "He venido a este
mundo para iniciar una crisis: los que no ven, verán, y los que ven,
van a quedarse ciegos". Lo que cuesta para todos es el constante
morir para vivir, el perseverante crecer para servir y el culminante
amar par unir. Sí, hermanos. "Tú que duermes, despiértate, levántate
de entre los muertos, y la luz de Cristo brillará sobre ti." 48
HUESOS
SECOS: ESCUCHEN LA PALABRA DE DIOS"
La experiencia profética del profeta Ezequiel es muy hermosa
para todos los que viven en Bolivia. El pueblo de Dios que anda en la
historia actual siente una tentación de desanimarse, como los judíos
cautivos en Babilonia. Ezequiel andaba en una llanura llena de huesos
secos en todas direcciones y Dios le preguntó, ¿Piensas que podrán
revivir estos huesos? El profeta contestó, tú solo lo sabes. Entonces
Dios le dijo: Habla de mi parte sobre estos huesos y les dirás, huesos
secos, escuchen la Palabra de Dios. Se produjo un ruido y un alboroto:
los huesos se juntaron y se cubrieron de nervios, carne y piel;, y el
espíritu entró en ellos. Se reanimaron y se pusieron de pie: eran un
ejército grande, muy grande". Así, Jesús, quiere que todos los
Cristianos que se sienten desanimados y desesperados, vuelvan a
reanimarse por el Espíritu. Los deseos de la carne son muerte y perdición,
pero los del espíritu son vida y paz. Todos los que piensan como los
judíos dicen: Se han secado nuestros huesos. Se perdió nuestra
esperanza, el día ha llegado para nosotros, ya comienza a luchar
nuevamente para construir caminos nuevos y vivir esperanzas renovadoras.
Ese es el gran sentido de la Resurrección de Lázaro en el
Evangelio. Jesús quiere decirles a todas la Martas y Marías, llorando
la muerte de un Lázaro, "Yo Soy la Resurrección y la Vida; quien
a mí se una con viva Fe, aunque muera vivirá". ¿Quiénes son los
Lázaro muertos en vida sonámbulos por nuestras calles, sino los
drogadictos y alcohólicos, los deprimidos y los entristecidos, los
vencidos y los perdidos, cuyas vidas no tienen ni rumbo ni sentido?. ¿Qué
dice Jesús a todos ellos? ¡Lázaro sal fuera! Si ustedes creen de todo
corazón que Cristo resucitó de entre los muertos y confiesan con sus
bocas, que Jesús es el Señor, serán salvados y el Padre les será muy
accesible. Además la nueva vida de su corazón va a subir y quitar la
confusión de tu mente. Dios quiere bendecir abundantemente sus vidas
cuando están invocando su Nombre en Alabanza.
Ahora renacidos en Cristo por el Espíritu, como un Lázaro
resucitado, todos van a admirar a un muerto andando con las manos y los
pies vendados y la cabeza cubierta con un velo. Jesús- Libertador va a
gritar: "Desátenlo y déjenlo andar". La Nueva libertad no es
solamente una experiencia personal y de pequeños grupos. La Iglesia
entera está en un Nuevo Pentecostés como Pueblo de Dios. Dios quiere
decirles a los profetas de hoy, como Ezequiel en su tiempo,
"Ustedes sabrán que Yo soy su Dios, cuando abra sus tumbas, pueblo
mío, y los haga salir. Infundiré mi Espíritu en ustedes y volverán a
vivir, y los estableceré sobre su tierra y ustedes entonces sabrán que
yo soy su Dios". Sí "Huesos secos, escuchen la palabra de
Dios. Voy a hacer entrar un Espíritu en ustedes y volverán a
vivir". 49 NUESTRO DIOS REINARA DESDE UN MADERO
Que entrada más misteriosa: El Rey de los Reyes no está montado
en un caballo orgulloso, sino en un burro prestado. El Señor de los Señores
no tiene un ejército armado a su lado, sino la muchedumbre pobre que
rodea sus pasos. El que es adorado en el cielo por los coros
celestiales, es reconocido en la tierra por los niños lactantes. Sus
seguidores no son los ricos y poderosos de este valle de lágrimas, sino
los pobres y los humildes que alaban en los caminos de la esperanza.
Por eso la ciudad alborotada preguntó: ¿Quién es este? Y la
muchedumbre contestó: "Este es el profeta Jesús de Nazareth de
Galilea".
El profeta que nunca es aceptado en su propia tierra ni
reconocido por su propia gente, encuentra su bienvenida en los
peregrinos de tierras lejanas, y sus seguidores entre los pecadores
salvados. La multitud grita hoy en día, "Hosanna, viva el hijo de
David, ¡Bendito el que viene en nombre del Señor!, dentro de pocos días
va a clamar el que viene ¡Crucifícalo! ¡Crucifícalo! ¡Oh, Cristo de
sangre roja¡ ¡Oh Cristo, valor supremo¡ Llevaba roja la túnica, roja
de sangre y fuego.
Que entrada más dolorosa¡ Acercándose a Jerusalén nuestro
humilde salvador comenzó a llorar y dijo: "Ojalá en este día tú
también entendieras los caminos de la Paz. Pero son cosas que no puedes
ver ahora". Las lágrimas sagradas profetizando la Santa Cruz y la
destrucción de Jerusalén, no llama a buscar urgentemente los caminos
de la violencia, sino los de la verdad. El que está envuelto en
silencio está trazando direcciones nuevas que construyen la paz. El
vino como Evangelizador de la paz. Paz para ellos que estaban lejos, paz
para aquellos que estaban cerca. Que nadie entre nosotros tenga que
escuchar la fuerte denuncia contra Jerusalén. Te aplastarán contra el
suelo, a ti y a tus hijos que viven dentro de tus muros, y no dejarán
en ti piedra sobre piedra por que no has reconocido el tiempo en que
Dios te venía a visitar:”. ¡Oh, Cristo, de sangre morena! ¡Oh,
Cristo Amor, divino! Llevaba blanca la túnica, blanca de amor y fuego.
Qué entrada más maravillosa! El Cristo, de la mansedumbre
campestre, está profetizando la victoria de la Santa Cruz sobre la
derrota del pecado. Jesús de la humildad brillante está prometiendo la
Gloria de la Santa Cruz, disipando las tinieblas del error. El Señor de
la locura divina está proyectando la Sabiduría de la Santa Cruz, sobre
la confusión de los siglos. Las Aleluyas y las hosannas más auténticas
nacen de corazones purificados por la entrada triunfal. 50
ALELUYA,
¡ALELUYA!
¿Qué dice la palabra, Aleluya, para los cristianos? Dice nada y
dice todo, porque su contenido no es intelectual, sino experimental.
Cuando el corazón está lleno de gozo, que no puede contenerse y
tampoco puede expresarse en palabras humanas, comienza a regocijarse en
sílabas. De ahí nace la música del alma, que comunica su mensaje de
felicidad a todos: "Soy Feliz, Cristo Resucitó! Es más poderoso
que el pecado! ¡Soy Feliz porque la Luz brilla en las tinieblas y las
fuerzas del mal jamás la apagarán! Soy Feliz porque el Sepulcro está
vacío por toda la eternidad! El que murió una sola vez ya no muere más,
pero el que resucitó sigue Resucitado por toda la eternidad. "Qué
doblen jubilosas, y proclamen el triunfo del amor, llenen nuestras almas
de Aleluya, de gozo y esperanza en el Señor.
¿Qué es la Resurrección de Jesús, sino el gran paso en cuerpo
de la muerte a la vida? Pero que cambio más grande, porque este Nuevo
Cuerpo es luminoso y ágil, es sutil e inmortal. Entra en salas con
puertas y ventanas cerradas, sin romper las paredes y tumbar los techos.
Come pescado asado sin necesidad de digestión, conversa con sus amigos
sin pisar tierra. Aparece y desaparece con la facilidad de la luz y anda
sobre el mar, sin hundirse en las olas. Aquellos que comparten algo de
esta Resurrección, ya han pasado de las tinieblas a la luz, de la
muerte ala vida con El. "Los sellos de la muerte han sido rotos, la
vida siempre es libertad, ni la muerte ni el mal, son para el hombre su
destino, su última verdad". ¡Aleluya, Aleluya!
Pero hay que insistir, ahora, que la presencia del resucitado
Salvador no es simplemente una experiencia espiritual, sino son
verdaderas Apariciones. El cuerpo Glorificado está presente ante Pablo,
que camina a Damasco para perseguir a los Cristianos. La voz dice,
"Saulo, Saulo, ¿porqué me persigues?" EL preguntó:
"Quién eres, Señor?" Y la voz: "Yo soy Jesús, a quien
tú persigues". La Luz brilla, la Voz habla, pero la Persona de Jesús
mora en nuestros corazones y anda con su Cuerpo Luminoso en apariciones.
Es el mismo Jesucristo de antes, pero con llagas brillantes y manos
palpantes. "Derrotados la muerte y el pecado, es Dios toda la
historia y su final; esperad con confianza su venida, no temáis, con
vosotros él está. ¡Aleluya!, ¡Aleluya!
Cada año la iglesia quiere insistir que la Resurrección de Jesús
es la fiesta principal. Si no hay Resurrección, estamos todavía en
nuestros pecados y somos los más miserables mentirosos entre todas la
criaturas. Pero Cristo Resucitó, grita Pablo, y con él nosotros también
participamos en una nueva vida, en una nueva creación. Seamos
constructores de una nueva humanidad, de una nueva civilización del
amor. "Volverán encrespadas tempestades para hundir vuestra fe y
vuestra verdad. Es más fuerte que el alma y que su embate el Poder del
Señor, que os Salvará". ¡Aleluya, Aleluya¡ |
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